La efectividad de un buen gel antibacterial se basa en varios factores que son:
• ¿Cuánto usas?
• ¿Sigues la técnica adecuada?
• ¿Cuál es su consistencia?
Algunas situaciones en las que el uso de un gel antibacterial para manos puede ser apropiado incluye cuando viajas en transporte público, te dan la mano o tocas un animal, después de tocar un carrito de supermercado, etc.
Para usarlo correctamente, sigue estos 3 pasos y recuerda que tus manos deben estar limpias:
• Coloca la cantidad recomendada en la palma de una mano. Lee las instrucciones del fabricante.
• Frota tus manos, cubriéndolas en su totalidad, incluso entre los dedos.
• Deja de frotar el gel una vez que tu piel esté completamente seca.